Eduardo Sierra en Sáenz Peña:“Hay ambientalistas que quieren hacer del monte un museo, y condenar a la gente a la miseria”

“El monte no es la vegetación natural del Chaco. Antes de la llegada de los españoles el Chaco era una sabana de grandes extensiones, es decir era un terreno con pastizales altos y montecitos de árboles espinosos, y cuando llegaron los colonizadores trajeron una ganadería que no era adecuada para la zona y que generó un desastre ecológico”, relató el ingeniero Eduardo Sierra cuando fue consultado por los desmontes.
Detallando aún más la información remarcó el profesional que “esa ganadería compuesta por cabras, ovejas y vacas generó un sobre pastoreo que fue dañino para los pastos de la región y que además provocó la invasión de las leñosas espinosas que destruyeron la naturaleza del lugar”.
“Esa es la historia de estas tierras. Cuando viene gente ignorando esos antecedentes se cree que todo ese monte degradado y espinoso es la vegetación natural y comete el error de encuadrarlo dentro del concepto de bosque, cuando ese estado de la naturaleza en el Chaco es el que está en equilibrio con el ambiente”, remarcó sin vueltas el profesional que disertó sobre clima en la estación experimental del INTA en Sáenz Peña.
Al mencionarse “lo intocable de los montes”, sin rodeos en la respuesta definió que “hay ambientalistas que quieren un museo y con esa idea están condenando a la gente a la pobreza”. “Quieren dejar a la naturaleza en estado prístino pero en el medio está la gente muerta de hambre y eso no es equitativo, porque para ser sustentable primero debe ser rentable”, sorprendió diciendo con rudeza el experto en agroclimatología.
“Se debe lograr la sostenabilidad ambiental, que no es otra cosa que mantener a la naturaleza en un estado de continua regeneración y el monte que había en el Chaco era un estado de degradación de la naturaleza por acción de la ganadería caprina, ovina y vacuna que se comió los renovales y el pasto que había en la original sabana”, continuó.

Más verde que hace 40 años
A esas definiciones referidas a la naturaleza del territorio chaqueño, añadió Sierra la explicación de que “cuando se comienzan a desmontar todas esas áreas de espinal en realidad se está aforestando, es decir se está restableciendo la vegetación natural, por eso en las imágenes satelitales el Chaco se ve mucho más verde ahora que hace cuarenta años”.
“Todo ese monte degradado prácticamente no tenía verde, abajo con las cabras que trajeron los castellanos ramoneando los pocos pastos que había y un piso que era solamente polvo. No hay palabras para describir esa situación. Ahora se ha restablecido mucho la vegetación que corresponde a un Chaco sabana, es decir un pastizal con los árboles”, definía Sierra.
En el ideal de un manejo virtuoso del bioma chaqueño, el profesional retrucó a los “ecologistas” señalando que “el panorama de estas tierras debería eliminar los excesos de bosque espinoso, dejar montecitos y en el medio un pastizal en el que, sin hacer sobrecarga, se puede hacer una buena ganadería porque para que haya sustentabilidad se necesita rentabilidad”. “En esos campos se puede además hacer agricultura que, alternando con pastizales, generará un ciclo que será naturalmente bueno”, remarcó.

Ignorancia verde
“Como estamos entrando en un período natural sin lluvias creen que la limpieza de esa vegetación espinosa lo provoca, cuando en realidad al permitirse el desarrollo de los pastos se está enviando mucha más humedad a la atmósfera de la que enviaba ese monte espinoso”, siguió diciendo Sierra.
De conocimiento público es que las organizaciones ecologistas entienden que el concepto de lluvias está directamente relacionado con los montes. “Sería bueno que los verdes antes de hablar estudien un poquito y para eso les ofrezco la Facultad de Agronomía de la Universidad de Buenos Aires, donde tenemos muy buenos profesores que les pueden enseñar a esos ignorantes lo que es vegetación natural y lo que es vegetación degradada por un mal empleo, explicándoles que lo mejor que se le puede hacer a la naturaleza es devolver la vegetación a su estado original”, finalizó diciendo Eduardo Sierra en su visita al Chaco.

Fuente: Diario Norte

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