Técnicos de la Dirección de Bosques participaron de las Jornada Regional del Algarrobo
La bienvenida estuvo a cargo de las autoridades de la Estación experimental Agropecuaria (INTA) Sáenz Peña.
El encuentro se desarrolló por
espacio de dos días en la sede del INTA Sáenz Peña y en la oportunidad se presentaron los
resultados obtenidos en el proyecto financiado por el gobierno australiano a
través de AusAID, con exposiciones de los participantes de Argentina,
Australia, Bolivia, Chile, Paraguay y Perú.
Estuvieron presentes numerosos
profesionales de no solo del INTA Sáenz Peña sino también de otras provincias, técnicos
de la Dirección de Bosques entre otros profesionales no solo de la región sino también
de países vecinos.
Los temas que se desarrollaron estaban relacionados con el primer relevamiento de los recursos
genéticos del algarrobo en el Gran Chaco Americano, usos del fruto del
algarrobo como alimento humano y forrajero, métodos y experiencias en la
transformación de una especie forestal nativa en un recurso biológico para el
desarrollo.
Posteriormente los
participantes realizaron una serie de
visitas a un aserradero de algarrobo, a una fábrica de muebles finos de
algarrobo y también recorrieron una forestación con algarrobo.
El contador Edmundo Ybarra de la Asociación de
productores forestales explicó en el marco de esta jornada que “el Chaco era pionera en esta materia con más de 20
años de desarrollo tanto en plantación como
en aprovechamiento maderable y creo que
también registramos la mayor experiencia en el procesamiento de la chaucha”.
“El algarrobo es una planta
colonizadora ero a su vez lo que ellos
están visualizando son todos los
servicios que resta esa planta”, dijo Ybarra al recordar que a los 15 años de
plantar un algarrobo por lo menos la
experiencia del Chaco ya tiene ara implantar la industria y a los 20 años puede hacer tala rasa, “estas
son experiencias que nosotros hemos hecho que están a la vista y que antes
hablamos de 40 años de algarrobo para usarlo.
Paraguay, Chile, Bolivia, Perú,
Australia participaron de esta jornada y cada país expresaron las experiencia
que tuvieron. Por su parte Australia tuvo
la oportunidad de ver las bondades que
tiene y como implantarla.
Desde Australia
Jeremy Brawner de Australia explicó que
están interesados en el algarrobo como un sistema distinto para la ganadería
e ingresos diversos con sistemas que se están
manejando en el Chaco, “nosotros tenemos
sistemas similares en Australia y
estamos aumentando la superficie y estamos compartiendo los conocimientos que tenemos con los que tienen aquí en Argentina para fortalecer la industria,
para disminuir los riesgos que tienen con la sequía y otras opciones que
existen como la reforestación, tiene un múltiple
propósito el algarrobo”.
Por otro lado dijo que “el el INTA posee una amplia diversidad sobre genética
y es muy importante para entender dónde vamos a poner estos algarrobos si es más para conservación o si es para producción y obtener
entonces las mejores procedencias. “Plantando bosques, realizando plantaciones
es algo bueno para el sistema, para e, ecosistema”, explicó.
El ingeniero Jeremy Brawner
explicó además que su interés está centrado en la genética del algarrobo. Al referirse
al tema de producción del algarrobo dijo
que “no tiene el valor que debería tener , están pensando más en un sistema demoño
cultivo y se debería pensar en un sistema
más diversificado y con esto se
puede mejorar muchas cosas, la producción, el ambiente, el
suelo”, concluyó.